Por el sudor se eliminan gran cantidad de toxinas propias y otras sustancias químicas que introducen a través de lociones, jabones disolventes, detergentes químicos o sustancias químicas en el agua de la ducha.

El uso habitual de la sauna infrarrojo restaura los procesos de infección de la piel. No hay manera más rápida de eliminar toxinas del cuerpo. Cuando se calientan nuestros tejidos se activan los procesos metabólicos y la energía. Y a mayor cantidad de energía celular, más capacidad curativa tiene nuestro cuerpo, tu sistema de defensa podrá deshacerse de todos los elementos dañinos que habitan entre los racimos moleculares como así también evitar que se deposite grasa en tus arterias y mejorar a su vez la circulación sanguínea.

Podrás sentir como tu cuerpo se relaja gracias a su efecto de masaje que calma los nervios y los músculos anudados, libera tensiones y restaura el cuerpo y la mente.

Cuando subimos nuestra temperatura corporal, aceleramos la curación de las infecciones porque con calor destruimos a los virus y también las células cancerígenas. Todo este proceso de elevar nuestra temperatura corporal para conseguir un beneficio para nuestra salud. Media hora de sauna equivale a correr de 9 a 12 km. Sin hacer el mínimo esfuerzo.

Beneficios

• Fortalece el sistema inmunológico
• Ayuda a quemar calorías y perder peso
• Mejora la circulación
• Oxigena los tejidos
• Abre las vías respiratorias
• Ayuda a eliminar toxinas
• Redice dolores musculares y articulares
• Elimina el exceso de líquidos acumulados
• Mejora la celulitis
• Fortalece el corazón
• Aumenta la producción de la hormona de crecimiento
• Reduce la resistencia a la insulina
• Relaja el organismo y reduce el estrés